Álbum Montreux '77 de Ella Fitzgerald - Canciones
Montreux '77
Reseña
El álbum Montreux '77 es otro espectacular documento en directo que captura a Ella Fitzgerald en su festival fetiche. Por consiguiente, en esta actuación de 1977, la "Reina del Jazz", ya en su etapa de veterana leyenda, demuestra que su amor por la música y su poder sobre el escenario seguían plenamente intactos. De hecho, la artista se presenta acompañada de su trío, en un formato que le permite una gran libertad.
Por lo tanto, la grabación transmite la energía y la emoción de una noche mágica en el festival suizo. Ella Fitzgerald recorre un repertorio de estándares con la sabiduría y la profundidad que solo los años pueden dar. Como resultado, su interpretación es de una emotividad sobrecogedora.
Además, a pesar del paso del tiempo, la cantante todavía es capaz de deleitar al público con su increíble dominio del ritmo y de la improvisación. La conexión con sus músicos y con la audiencia es, una vez más, total.
En resumen, 'Montreux '77' es un testimonio de la longevidad y la grandeza de una artista irrepetible, una lección de que el verdadero talento, como el buen vino, mejora con los años.
Listado de canciones del álbum Montreux '77
- Too Close for Comfort 3:27
- I Ain't Got Nothin' But the Blues 4:07
- My Man 3:48
- Come Rain or Come Shine 2:30
- Day by Day 1:46
- Ordinary Fool 3:20
- One Note Samba [Samba de uma Nota Só] 6:26
- I Let a Song Go Out of My Heart 4:31
- Billie's Bounce 4:49
- You Are the Sunshine of My Life 3:53
El álbum Montreux '77 es otro espectacular documento en directo que captura a Ella Fitzgerald en su festival fetiche. Por consiguiente, en esta actuación de 1977, la "Reina del Jazz", ya en su etapa de veterana leyenda, demuestra que su amor por la música y su poder sobre el escenario seguían plenamente intactos. De hecho, la artista se presenta acompañada de su trío, en un formato que le permite una gran libertad.
Por lo tanto, la grabación transmite la energía y la emoción de una noche mágica en el festival suizo. Ella Fitzgerald recorre un repertorio de estándares con la sabiduría y la profundidad que solo los años pueden dar. Como resultado, su interpretación es de una emotividad sobrecogedora.
Además, a pesar del paso del tiempo, la cantante todavía es capaz de deleitar al público con su increíble dominio del ritmo y de la improvisación. La conexión con sus músicos y con la audiencia es, una vez más, total.
En resumen, 'Montreux '77' es un testimonio de la longevidad y la grandeza de una artista irrepetible, una lección de que el verdadero talento, como el buen vino, mejora con los años.
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